Es la interrupción definitiva de las
menstruaciones por un año, resultado de pérdida de la función
ovárica. En México ocurre a la edad promedio de 47 años, entre los 41 a 55
años, durante este periodo las mujeres pueden presentar
cambios de estado de ánimo, cambios en su piel,
deseo sexual, alteraciones del sueño,
fríos, bochornos, pérdida gradual de la memoria, ansiedad.
Existen tratamientos
médicos y alternativos para que esta etapa no afecte la calidad de vida de
la paciente y su relación de pareja.
Visita a tu ginecólogo,
quien te orientará en un tratamiento adecuado y seguro para tu estado de salud.